Me hago eco de lo que ha pasado en Argentina, con esta mujer que solicitó el aborto por vía legal y ha salido escaldada. Dejo la noticia aquí para que se vea.
Si esto hubiera pasado en España…, bueno, aquí más de un cura cae. O igual no, con lo pasivitos que estamos últimamente. Y el problema no es que odiemos a los curas porque sí, si en el fondo tampoco les odiamos. Es sólo que no estamos de acuerdo con ellos, con la Iglesia si se quiere, en la cantidad de gilipolleces que dicen aún, hoy en día, en pleno siglo XXI.
Que si NO AL CONDÓN, que si NO AL ABORTO, que si NO A LOS MATRIMONIOS HOMOSEXUALES. ¿Sabrán decir SÍ a algo? Es que si aún nos creyéramos La Biblia, aunque no fuera a pies juntillas, sólo un poquito, que nos digan por favor donde ponga que no se puedan utilizar métodos anticonceptivos, que no se pueda abortar, y que las personas homosexuales no puedan convivir en pareja. No creo, para nada, que sea el deseo de su Dios, sino más bien instrumentos que la Iglesia quiere seguir utilizando para controlar, de una forma u otra, a sus cada día menos creyentes, gracias a Dios (sí, ya, esto igual sobraba).