Se me ocurren muchas cosas cuando saco al perro a pasear y que el pobre haga sus necesidades, algo que sólo sucede dos veces al día -para su desgracia-, pero en lo que me da tiempo a pensar muchas cosas -para la mía-. En esta ocasión se trata de entender lo que significa ser feliz.
Llego a varias conclusiones, que trataré de sintetizar al final en sólo una, pero llego a ellas de una forma matemática, por frío que parezca, pero es así. Pienso que no es cuestión de permanecer en un estado de felicidad perpétua. De hecho no creo que eso exista. Lo que creo es que a lo largo de la vida vamos pasando por momentos dulces y momentos amargos. Y es la suma de los momentos dulces, felices, menos la suma de los momentos amargos o infelices, la que nos da como resultado que nuestra vida sea en mayor parte feliz o infeliz. La ecuación, por lo tanto, sería la siguiente:
Felicidad general = momentos felices – momentos infelices
Sin embargo no podemos resumirlo de forma tan banal. Resulta que los momentos felices los recordamos con cierto entusiasmo, pero de forma pueril, abstracta y por poco tiempo. Es más, nos genera, si sucedieron largo tiempo atrás, estados de nostalgia y/o melancolía, que en el fondo no son más que estados que generan tristeza actual, es decir un momento amargo no prolongable en el tiempo, circunstancial, pero lo suficiente para que entre en la ecuación. Por tanto, la ecuación variaría de la siguiente manera:
FG = Felicidad General
MF = Momentos Felices
MI = Momentos Infelices
FG = MF – (MI + (MF – 1))
Empieza a complicarse, ¿verdad? Eso es porque tomamos como momentos infelices circunstanciales todos aquellos que pertenecen al pasado y que vienen de un momento feliz, por eso le resto 1, porque tenemos que actuar bajo el supuesto de que el momento a recordar puede venir de una situación feliz, y como no nos queda más remedio que dar cosas por sentado… (es lo que tiene el corazón, supongo).
También hay que tener en cuenta que los momentos infelices se recuerdan con mayor frecuencia que los felices, provocando también que se genere un momento infeliz al recordarlos. La ecuación cambia, por tanto, a lo siguiente:
FG = MF – (MI + (MF – 1))^n
No creo que sea necesario prolongar más la ecuación. Teniendo en cuenta que además los momentos felices se recuerdan de forma más prolongada que los felices, la parte de infelicidad se agigantaría al tener que incorporar nuevas potencias.
Todo esto me hace preguntarme si la ecuación, según la he establecido yo, ha de dar en algún momento algún valor positivo. No sé qué pensar… ¿Algún argumento para rebatirlo?
En un primer momento no estaba seguro de querer escribir algo hoy, por el tema del estado de ánimo y eso, pero me ha parecido que un post como este era incluso apropiado, y muy descriptivo del mismo. De hecho, me ha salido mucho mejor que si lo hubiera escrito previamente en papel, que era lo que tenía pensado hacer, y como tengo costumbre. Lo dejo abierto al debate.
Por cierto, lo de poner chicas guapas como foto a partir de ahora…, bueno, es sólo una temporada de las mías. Supongo que ya se me pasará.
Fotos enlazadas con Esimio Incomprendido.
Pero es que quizás depende de como ves las cosas en el momento presente, no veo yo tan difícil eso de ser un poquito feliz
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Me han gustado tus ecuaciones. Yo soy más simple ya que creo que la felicidad es un estado mental o un camino hacia algo.
Un beso feliz
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Me lo apropio a ver si sale, en un año te digo si?
jajajajajajajaj
besicos
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Azusa: Estoy de acuerdo contigo, aunque tengo que decir que a veces se ven negras negras…
La Interrogación: Es una buena forma de verlo. Besos para ti también.
Belen: A ver si es verdad y el 2009 por estas fechas estamos comentándolo, jajaja. Más besos para ti.
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Me pierdo un poco entre tus fórmulas, que soy chica de letras, pero mi experiencia me dice (como tú apuntabas) que la Felicidad completa no existe, sólo hay momentos felices, aquellos que interesa atesorar porque, al fin y al cabo, eso del disfrute y del gozo es lo único que nos llevaremos en la barca esa que atraviesa el lago Estigia.
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Tesa: Así es. Por cierto, te ha quedado bien lo del lago Estigia, jejeje, te ha faltado a Caronte.
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En realidad, está demostrado que con el tiempo las personas olvidan los momentos infelices y las amarguras y recuerdan sólo las cosas buenas. Es un proceso de orden psicológico. Si una persona sólo terminase por recordar sus penas, se suicidaría.
Y no me refiero sólo a que se superen, sino a que se terminen realmente olvidando. Para mantener el equilibrio anímico, supongo.
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Miss Sinner: Pues que me expliquen cómo se hace… 🙂
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Pasé por aqui, hoy sabádo, pensando que encontraría algo de inteligencia, lucidez, etc.
Pero con qué me encuentro?… Con gente que está tomando desde temprano.
Nos vemos en el bar muchachos. Salud!!!
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Pues yo sí creo que la felicidad existe. Pero se trata más bien de un «sentirse a gusto», una estar satisfecho con lo que tienes y lo que vives en el momento. Nada que ver con esos momentos puntuales de estallidos de alegría. No, la felicidad es algo más calmo. Creo yo, vamos 🙂
Al menos yo me considero una persona feliz.
Besos
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GT: Jajaja.
Nanny-Ogg: Pues me alegro por ti 🙂 Besos.
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CREO QUE ME GUSTA POR QUE ME DA TIEMPO DE PENSAR UN RATO EN TI E IMAGINAR QUE QUIERO HACERTE MIA Y SOLO MIA MUCHS KISS
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